MIS ESTUDIOS SOBRE
LA ENCÁUSTICA
Concepto, orígenes, métodos, descubrimientos
arqueológicos, restablecimiento, encáustica del siglo XX, excelencias de
la encáustica.
CONCEPTO:
Desde que estoy investigando sobre esta técnica, he observado que la
encáustica es un procedimiento pictórico, poco conocido por el público en
general, incluso, algunos pintores, al preguntarme sobre mi actividad
pictórica, se quedan extrañados cuando les menciono la palabra
“encáustica”.
Basándome en lo que dicen los diccionarios, enciclopedias, textos
clásicos e interpretaciones de éstos por artistas e investigadores,
concluyo, definiendo lo que es “encáustica”: como un procedimiento
pictórico termofundible, cuyo principal ingrediente es cera virgen de
abejas y una porción variable de resina dammar, ambas en estado puro,
disueltas con calor y mezcladas con los pigmentos y colorantes. Además, se
pueden fundir con otros ingredientes (aceites volátiles o un álcali),
empleando el calor durante el proceso y al finalizar la obra.
ORÍGENES:
La búsqueda del origen de la encáustica concretamente, y el descubrimiento
de un creador individual de la misma, es una tarea vana e inútil,
aunque ciertamente, y por la influencia de la cultura renacentista, basada
en gran parte en el protagonismo individual del hombre, no deja de preocupar
al investigador actual este aspecto de la cuestión. Pero si pretendiera
dar una solución a este enigma, me encontraría ante un problema similar
sobre quién inventó la escritura, o quién fue el autor del Poema de Mío
Cid, si es que lo hubo.
Por tanto, a lo más que puedo aspirar es a realizar una visión panorámica
sobre pueblos y sociedades que sirvieron de base a un procedimiento tan
antiguo. El origen de la encáustica debe estar ligado al de la pintura en
general.
Aunque no está generalmente admitido que la encáustica provenga de la
antigua civilización egipcia, pienso que sí, por los siguientes motivos:
Los egipcios eran maestros en la obtención de perfumes, tanto líquidos
como incorporados a una emulsión grasa. Conocían las cualidades de los
productos naturales, especialmente la cera, empleada en embalsamamientos,
así como los secretos de emulsiones y fusiones, no sería extraño, por
tanto, que conocieran la encáustica en todas sus variantes. Los egipcios,
en los trabajos portátiles, adicionaban cera a los colores que disolvían
con aceites, también utilizaban la cera para proteger la pintura e
hicieron uso de diferentes resinas disueltas en óleos fijos y volátiles.
Las necrópolis tebanas del siglo XV A.C. y los hipogeos de Beni-Assan,
constituyen magníficos testimonios de las cotas conseguidas en la pintura
egipcia, en la que destacan el colorido preciosista, fresco y de un
delicado diseño de sello inconfundible.
Por los textos de Plinio,
se sabe que los pintores que perfeccionaros la encáustica fueron griegos.
Se refiere en primer lugar al pintor Arístides de Tebas, que vivió por los
años 340 a.C., después cita a Polignoto de Tasos, junto con Pausías, los
que perfeccionaron el método, utilizándolo en sus murales, consiguiendo un
amplio desarrollo artístico.
MÉTODOS:
Tras la lectura de las diferentes traducciones e interpretaciones del poco
explícito pasaje de Plinio, en donde enumera los métodos de encáustica,
corroborado con las interpretaciones y prácticas realizadas por artistas e
investigadores durante los siglos XVIII y XIX, intentando restablecer el
antiguo método, puedo sacar unas conclusiones aproximadas a lo que fue en
realidad este proceso.
Veo como Plinio establece dos modos bien diferenciados. Por un lado, dos
de ellos estaban reservados a los artistas que empleaban la espátula, bien
sobre una superficie de madera, que podría estar previamente encerada, o
no, y sobre marfil. Y finalmente un método de pincel sobre barcos.
Imagino que, en los dos primeros modos, se empleaban las ceras calientes
con el cestrum; aunque no se puede eliminar la posibilidad del uso del
pincel en este proceso, como se ha visto en las prácticas de
investigadores y las mías propias, al menos para mezclar tonos y matices
en la paleta caliente y trasladarlos posteriormente a la tabla,
sirviéndonos después del cestrum y cauterium para ir fundiendo las tintas
que el pincel no había podido realizar.
El segundo método, el trazo inciso sobre el marfil delineaba la forma y se
incrustaba después con colores a la cera. Parece ser que este género sería
usado en pequeñas obras en miniatura. Citamos como ejemplo a Iea de Cicico,
pintora excelente en este género de pintura.
Otras interpretaciones realizadas por investigadores, consiste en manchar
la superficie del marfil con un color oscuro, y con el cestrum o punzón,
ir rascando la superficie a manera de esgrafiado, logrando un dibujo al
claroscuro.
El tercer método, en el cual (según Plinio) se empleaba la cera con el
pincel, es el que más polémica suscitó durante el restablecimiento, al no
ponerse de acuerdo sobre que sustancia se empleaba para hacer soluble a la
cera y poder utilizarla con el pincel.
Pienso que, al menos, hay dos tipos de substancias que permiten “mantener”
a la cera líquida. Una es la utilización de una base alcalina (sosa,
potasa, etc.), con lo que se consigue “despojar” a la cera de las
sustancias grasas, mediante la saponificación, haciéndola soluble al agua.
El otro tipo, lleva a la utilización de “esencias volátiles” en los que la
cera se disuelve, y así facilita su mezcla con los pigmentos y colorantes
y su aplicación con pincel, sirviendo como diluyente la misma esencia
volátil.
Por los relatos de Plinio, se sabe que estas dos substancias eran
conocidas en la antigüedad. El relato que hace sobre la tabla “Jaliso” de
Protógenes, queda claro que se empleaba el pincel, así como la formación
de espuma de este jabón de cera. En otros relatos menciona la existencia
de esencias volátiles, capaces de disolver a la cera y hacerla aplicable
con el pincel.
DESCUBRIMIENTOS ARQUEOLÓGICOS
Retratos de El Fayúm
Comparto plenamente la opinión de que los retratos de El Fayúm, son las
únicas pinturas de la antigüedad en las que los investigadores
especializados se han puesto de acuerdo en asegurar que son Encáusticas.
Su finalidad era
ciertamente funeraria. Tales tablillas eran incrustadas en la parte
superior de la momia, disimulando los bordes con las vendas, de manera que
hicieran creer que el muerto representado miraba al exterior por esa
abertura. Como podemos observar en la figura de la derecha.
Por la extraordinaria
expresión de vida que desprenden estos retratos pintados sobre tablillas
de cedro, es seguro que fueron pintados en vida de sus modelos.
La calidad transparente de
los tonos deja ver a través de la cera sus tonalidades anteriores, a
través de los surcos realizados por la herramienta de forma dentada. En
todas las obras que he podido ver es perceptible la huella del hierro en
las carnaciones y del pincel en los ropajes.
Estos retratos, que
representan a hombres y mujeres jóvenes en la mayoría de los casos, tienen
una intensidad de mirada que desconcierta. Algunas figuras femeninas
tienen los ojos agrandados con la idea de idealizar al modelo. Un aspecto
digno de resaltar, es el aire moderno de muchos de estos retratos, parecen
como si fuesen de época reciente.
Pinturas pompeyanas
Tras los descubrimientos realizados en Pompeya, Herculano, los
investigadores no se han puesto de acuerdo en definir la técnica pictórica
de estos hallazgos, unos opinan que son frescos, otros que son temples y
otros, entre los que me encuentro, que opinamos que son encáusticas.
¿Frescos? Justifico la causa de esta definición, porque en realidad, estas
pinturas están realizadas sobre las tres capas de estuco de cal y arena, o
mortero graso, clásicas de la pintura al fresco.
En observaciones visuales, se aprecian las tres capas de estuco y
posteriormente la capa pictórica, que está perfectamente delimitada. Sin
embargo en los fondos monocromos, se aprecia la incrustación de la pintura
en la última capa de estuco.
Los que opinan que son encáusticas se basan sobretodo en el análisis
químico de fragmentos de estas pinturas, que arrojan unos resultados menos
divergentes que los obtenidos por el estudio de los textos clásicos o por
la observación visual.
Fragmento
de pintura pompeyana
Por tal motivo, concluyo, que estas pinturas han sido ejecutadas sobre las
tres capas clásicas del fresco, pero sólo los fondos han sido ejecutados
con tal técnica, dejando secar el resto, que se realizó con la técnica
encáustica, en cualquiera de sus variantes.
RESTABLECIMIENTO DE LA ENCÁUSTICA
Tras el descubrimiento de las pinturas murales de la Domus Aurea (Roma),
las de Pompeya, Herculano y otras localizaciones, los investigadores
sienten interés en descifrar la técnica de estos murales. Para ello había
de adentrarse en los testimonios que pudieran transmitir sus
contemporáneos, en los escasos escritos legados por ellos.
Al analizar el poco claro
pasaje de Plinio (Encáusto pigendi duo fuere antiquitus génera…..) surgen
toda suerte de procedimientos, intentando restablecer el método de los
antiguos.
Respecto al método en
caliente, sobre tabla u otros paramentos, los investigadores a partir del
siglo XVIII, han realizado innumerables ensayos. Caylus propone un método
en el que se mantenían las ceras en cuencos, paletas y soportes,
calentados al baño maría, para lo cual se fabricó unos artilugios muy
complicados, por lo que se vio obligado a abandonarlo, sin embargo, hoy en
día con la electricidad, se puede realizar sin ningún problema.
Aunque las investigaciones de Requeno se centran en el tercer método de
Plinio (con pincel), detalla un método para pintar a la encáustica con
estiletes calientes sobre una plancha, bajo la cual estaban las brasas,
estas ceras eran llevadas al cuadro son la punta de la espátula caliente.
Otros procesos de Caylus, consistían en pintar con colores al agua sobre
una superficie encerada, o directamente sobre el soporte, y posterior
aplicación de una capa de cera. Requeno empleaba los colores
aglutinados con gomas y una pequeña cantidad de cera, pintura que cubría
de cera una vez terminada. Moretti pintaba con colores aglutinados con
glicerina, y posteriormente era sustituida por cera.
Igual que la técnica al óleo se llama así, porque el principal ingrediente
es el aceite, la cera debe ser el principal ingrediente de la encáustica,
desde el primer momento, se cauterice finalmente o no, o se emplee en
caliente o en frío.
Considero que estos procesos apuntados anteriormente, se deben llamar
“encaustizar una pintura” pues la cera se adiciona a posteriori como si de
un barnizado se tratara. Igualmente no se puede llamar óleo a una pintura
pintada al temple, con una mano de aceite superpuesta.
Tras el restablecimiento de la encáustica podemos destacar como máximos
exponentes a Vicente Requeno y Pedro García de la Huerta, por lo
documentado de sus investigaciones, preferentemente con la resolución de
cera. La reconstrucción de Requeno contó con enorme prestigio, su método
se propagó rápidamente por todas las grandes ciudades italianas.
García de Huerta
experimentó con éxito (después de hojear un folleto de Juan María Astori),
la resolución de la cera con lejía de cenizas. Para darle consistencia a
la cera le adicionaba resina, aconsejando el encáusto una vez terminada la
obra.
Aunque los métodos que
ponen en consideración tanto uno con sus “pruebas”, como el otro con sus
“comentarios”, no sean idénticos a la técnica antigua, sí contaron con el
aplauso de sus contemporáneos, y han seguido siendo desde entonces, un
punto de partida muy valioso para todo aquél que se haya interesado por la
encáustica.
Terminando con el
restablecimiento, podemos citar a Paillot de Montabert, con su método
consistente en mezclar la cera con resinas de elemí y de copal disueltas
con esencias volátiles. Así como Cros y Henry, los cuales propugnan una
restitución del método en caliente a base de barras de cera y resina
coloreadas fundidas sobre una paleta caliente, llevadas al cuadro con el
pincel y modeladas con los hierros calientes.
CERA PÚNICA
Este término tuvo su controversia a raíz del restablecimiento de la
encáustica, sobre el modo de interpretar los textos de Plinio, donde
confundieron el método para blanquear la cera con el de saponificación.
Plinio dice: “La mejor de las ceras es la que llaman púnica”…. y al
tratar sobre el blanqueamiento de la cera dice: “La púnica se hace del modo siguiente”…. y cita el proceso para
blanquear la cera.
La conclusión que saco es,
que la cera ha de ser despojada de sus impurezas, blanqueada y endurecida
para su uso en medicina o en pintura. Que el llamar púnica a la cera
blanca, se deba a la semejanza de ésta con la que llevaban de Cartago a
Toma, por ser los cartaginenses famosos en el arte de purificarla, y que
apellidasen “púnica” a la cera blanca, aunque su origen fuese otra región
diferente.
En la figura de la derecha, podemos
observar los distintos estados por los que pasa la cera virgen durante el
proceso.
LA ENCÁUSTICA DEL SIGLO XX
Respecto a los tratados actuales consultados, he realizado un extracto en
el que queda reflejado lo que tratan sobre la encáustica, con objeto de
orientar a los estudiosos sobre los aspectos más importantes que tratan al
respecto. Puedo citar el de María Bazzi como uno de los más completos y
documentados.
Soy consciente de la complejidad que entraña el analizar la obra de
artistas actuales. A lo largo de mis investigaciones he ido recopilando
datos que aparecen en publicaciones dedicadas a estos, del resto sólo
puedo reflejar su nombre y alguna otra referencia incompleta.
Por su extensa obra a la encáustica, tanto de mural como de caballete, así
como los valiosos datos reflejados en sus diarios, podemos citar al pintor
canario José Aguiar, el cual empleaba indistintamente el método en
caliente y el de la cera disuelta en esencia de trementina, (él los
llamaba colores duros y en frío), seguidor de éste, tenemos a Jesús de
Perceval, y en la actualidad tengo conocimiento, por haber conocido
algunas obras suyas, a Cuní, Guajardo, Antoni Pedrola, Pérez Pineda,
Domingo Oliver, Frederit Amat, y en Estados Unidos Jasper Jhon
Tras la consulta a los
titulares de Procedimientos Pictóricos de las Facultades de Bellas Artes,
respecto a la incidencia de la encáustica en el alumnado, reflejo un
extracto de lo comentado por ellos.
*La encáustica se emplea
de una forma académica, donde el alumnado por primera vez se interesa por
un aspecto de la pintura no experimentado hasta ahora en la mayoría de los
casos, “la materia”; sin embargo son reacios a emplear fórmulas ortodoxas,
haciendo experimentaciones con añadidos de las materias más insospechadas,
que en la mayoría de los casos y debido a la bondad de la cera empleada,
obtienen resultados satisfactorios. A partir de aquí y debido al complejo
de su preparación, la van abandonando paulatinamente, siendo escasos los
artistas que la continúan.
*La práctica de la
encáustica, reserva un enorme potencial didáctico a la hora de
sensibilizar al alumno en la elocuencia de la materia, resultando
sumamente eficaz en los procesos de mentalización sobre los tratamientos
de la capa pictórica, la aplicación de los instrumentos sobre el soporte,
la valoración de los efectos provocados por el uso racional de las
texturas y los estímulos perceptivos que propicia la factura lograda,
gracias a la versatilidad de este medio.
EXCELENCIAS DE LA ENCÁUSTICA
La entusiasta aceptación de la encáustica por mi parte queda fuera de toda
duda. No solo en la labor investigadora, a través de la cual he realizado
más de 200 obras, sino por la ingente labor de captación de nuevos amantes
de ella, como queda patente.
Voy a realizar un extracto de las excelencias
encontradas por los artistas e investigadores a lo largo de la
historia.
*La cera, dada su estructura y composición, se defiende ella misma frente
a otros aglutinantes, pues ha quedado sobradamente probado, que desde la
antigüedad más remota, incluso antes de ser empleada en pintura, se
utilizaba como elemento protector de una serie de materiales, tales como
la madera, el mármol, etc.…
*Todos los colores no
pueden ser empleados al aceite. Son de empleo difícil, por ejemplo: el
verde-gris, carmín de cochinilla, las lacas en general y los negros. La
cera por el contrario se alía con ellos.
*Este proceso ofrece
ventajas preciosas. Los colores secan instantáneamente, se puede retocar
sin raspar, la cera da transparencia y relieve, el color no se escama,
resiste a la humedad y a los vientos.
*Resumiendo: Las calidades de la cera, que la historia, la ciencia y mi
práctica, confirman que es capaz de formar una base sólida para la
pintura, no amaricelle jamás, pues no oxida con el aire, es poco sensible
al agua, permite mezclar todos los colores y superponerlos en cualquier
orden, consiguiéndose toda clase de tonos y matices que mantienen intacta
la luminosidad. Su notable pastosidad proporciona formas energéticas y
opulentas, no obstante permite el trazado de los más finos detalles.
Permite un sólido asentado de la materia hasta su secado sin sufrir
alteraciones en la pincelada o el color.
INCONVENIENTES
Ciertamente es un procedimiento que requiere proveerse de utensilios y
materiales no usuales, lo que conlleva un gasto adicional. También exige
un dominio y seguridad en la ejecución, superior a otros procedimientos. A
pesar de ello, son tantas las ventajas que nos aporta, que puede darse por
bien empleado el esfuerzo.
UTENSILIOS UTILIZADOS ACTUALMENTE POR EL ARTISTA:
Fig. 1.- Interior de la paleta térmica.
Fig. 2.- Paleta térmica termo regulable, 8x40x50 cm.
Fig. 3.- Cauterium eléctrico con mando termo regulable.
Fig. 4.-Cestrum
(espátulas), que con sus diferentes formas contribuyen
a dar calidades al
pigmento depositado sobre el cuadro.
Fig. 5.-Cestrum eléctrico con mando termo regulable.
|